Germán Velázquez demuestra que el Passivhaus alto puede ser hermoso

Esta torre de Bilbao es como nada que el mundo de Passivhaus haya visto.

Cuando se abrió el dormitorio de 26 pisos de Cornell Tech en Roosevelt Island, hubo una discusión entre los críticos arquitectónicos al respecto. Noté que es difícil diseñar un edificio Passivhaus;

Donde la mayoría de los arquitectos en estos días pueden usar vidrios de piso a techo, las ventanas de la casa pasiva son muy caras. Donde muchos edificios tienen trineos y otros elementos arquitectónicos que pueden agregar emoción visual, cada trote en una casa pasiva tiene un costo, por lo que tienden a ser cuadrangulares. Se convierte en un ejercicio en proporción y colocación cuidadosa de los pocos elementos con los que el arquitecto tiene que jugar; El arquitecto de la Casa Pasiva Bronwyn Barry tiene un hashtag para describirlo cuando se hace bien: #BBB o "Boxy But Beautiful".

También sugerí que "si alguna vez vamos a manejar nuestro CO2, vamos a ver edificios urbanos mucho más altos sin ventanas grandes, sin baches y trineos". Tal vez incluso tengamos que volver a evaluar nuestros estándares de belleza ".

Tal vez hablé demasiado pronto, porque Germán Velázquez de VArquitectos ha diseñado lo que ahora es la estructura Passivhaus más alta del mundo en Bilbao, y es muy atractiva.

El edificio Bolueta tiene 88 metros (289 pies) de alto y 28 pisos sobre el nivel del suelo, superando a Cornell por un poco para ser el edificio Passivhaus más alto del mundo. Parece realmente caro pero, de hecho, se ajusta al presupuesto, aunque para ser justos, los europeos hacen presupuestos que permiten a los arquitectos diseñar edificios agradables, incluso para viviendas sociales. "Ahora que Bolueta está completa, ya no hay excusas: es posible realizar tal proyecto en Bolueta, y es posible realizar uno casi en cualquier parte", dice Velázquez.

Es una mezcla de 63 unidades de vivienda social en la parte inferior y 108 en el edificio de gran altura, todas las cuales han sido vendidas. De acuerdo con el comunicado de prensa del Instituto Passivhaus:

La fachada del rascacielos más alto de la Casa Pasiva en Bilbao es también llamativa. Los edificios y el campo circundantes se reflejan en las superficies negras y brillantes. "Como resultado, el proyecto tiene un efecto significativamente más" ligero ", y el color negro simboliza el pasado industrial de la ciudad. Es un tributo a la industria antigua basada en el carbón de hace dos siglos y medio", explica Velázquez. . La segunda torre será de color gris para aludir al acero que alguna vez se produjo en Bolueta.

Mediante la elección de los materiales y el patrón ondulado de instalación, el hecho de que las ventanas sean una proporción relativamente pequeña de la fachada es un problema menor; es una piel realmente dramática. Es una hermosa caja.

Passivhaus es difícil. Hermoso, dramático Passivhaus es más difícil. Dije antes que "incluso podríamos tener que volver a evaluar nuestros estándares de belleza". Germán Velázquez de VArquitectos me demuestra que estoy equivocado. Este edificio será el comienzo de un nuevo tipo de efecto Bilbao, el estándar por el cual los edificios son juzgados.